¡Contra toda guerra que no sea la de clases! ¡Hacia la huelga general!

¡Contra toda guerra que no sea la de clases! ¡Hacia la huelga general!

Según el índice Global Firepower 2025, España ocupa el puesto 17 entre 145 países en gasto militar- Pero aún así y después del anuncio de gastar 33.123 millones de euros este año adelantaríamos en el horrible ranking, suponiendo un mínimo del 2% del PIB de ahora en adelante.

Desde la CNT-AIT, como anarquistas y anarcosindicalistas, abogamos por reducir el gasto militar a cero y no seguir financiando sus negocios psicópatas con nuestras muertes, la de las clases bajas, trabajadoras y desposeídas.

Entre 2014 y 2024, España incrementó su gasto en 10.215 millones de euros, pasando de 9.508 millones a 19.723 millones, un aumento del 107%.

Una encuesta del CIS de noviembre de 2024, indicaba que solo 14,2% de la población apoyaba que el Estado gaste “mucho más” en Defensa. Una impopularidad que es conocida de sobra por los sucesivos gobiernos, que han hecho hasta ahora todo lo posible por esconder y “minimizar” este gasto.

No podemos dejar de señalar que las fábricas armamentísticas no paran de crecer en todo el mundo. Existen en el territorio dominado por el Estado español sobre 550 empresas que operan el sector del armamento y como cuatrocientos fabricantes de muerte que distribuyen diferentes artilugios bélicos y servicios militares al Ministerio de Defensa (de la Guerra).

La UE clama por un rearme europeo ante la supuesta amenaza de que la alianza transatlántica se resquebraje. Entre las medidas de este plan: Bruselas plantea suspender las reglas fiscales. De esa manera, los gobiernos pueden invertir sin temor al castigo de la Comisión si superan el déficit del 3% del PIB. Esta suspensión no afecta a partidas sociales.

La carrera armamentística consume unas cantidades ingentes de energía y no está separa de los problemas climáticos que sufrimos hoy día. Es más, se comprueba que los agudiza. La industria de la muerte es de las más contaminantes que existe, pero al ser un gran negocio tratan de poner una pantalla opaca que haga difícil cuantificar con exactitud su destrozo en este mundo.

Las clases obreras, oprimidas y desposeídas somos mayoría, somos quienes hacemos que el mundo se mueva y podemos hacer que se pare. Caminemos hacia la huelga general y el desarme de ejércitos y no hacia el rearme y la debacle nuclear. Por una sociedad autogestionada de manera colectiva y horizontal.

Por lo anterior, llamamos a la acción desde cualquier posición para cerrar fábricas de armas y acabar con toda guerra.

¡Huelga general y revolucionaria
para redistribuir el trabajo y la riqueza y acabar con los ejércitos y sus guerras!